En realidad, puede decirse que nacemos con un temperamento dado, o una predisposición a rasgos de personalidad, pero estos están fuertemente condicionados por "el ambiente" (la experiencia vital de la persona, cual va modificando y permitiendo el desarrollo de la personalidad o habilidades para desenvolverse con herencia).
La tabla o cuadro temperamental es una breve descripción de los cuatro temperamentos básicos. Muestran los rasgos característicos de cada temperamento, así como sus aspectos positivos o negativos.